
El pasado 29 de julio dimos la bienvenida a 99 nuevos médicos, entre residentes y becarios, que a partir de agosto comenzaron su formación en el Hospital Universitario Austral y la Facultad de Ciencias Biomédicas. En la misma ceremonia, se entregaron los diplomas a 106 profesionales que finalizaron sus especializaciones y becas de perfeccionamiento.
El acto fue encabezado por el Dr. Guillermo Mazzolini, decano de la Facultad de Ciencias Biomédicas, quien compartió reflexión sobre el rol esencial que ocupan los residentes en nuestra institución:
«Vivimos días en los que la palabra residencia y la figura del residente están presentes en muchos ámbitos: en los medios, en la calle, en conversaciones cotidianas. Pero no todos saben que el residente es el corazón y el motor de un hospital universitario como el nuestro».
Por su parte, el Dr. Raúl Valdez, director del Comité de Residencias, puso en valor el trabajo conjunto entre hospital y facultad, destacando el propósito educativo que guía estos programas:
«El Comité de Residencias, integrado por profesionales del Hospital y de la Facultad, tiene por misión velar por los programas de residencias y de becas, para que éstos sean verdaderos programas educativos. Somos una universidad y un hospital universitario: la educación está en nuestro ADN».
Uno de los momentos más emotivos llegó con el testimonio de Macarena Iudica, egresada de la residencia posbásica en Hemato-oncología Infantil, quien habló en nombre de sus compañeros y compartió el sentido profundo de la vocación médica vivida durante la residencia:
«La sanación no siempre viene en forma de recetas, estudios o cirugías. Muchas veces empieza en una conversación, en una mano en el hombro, en el simple acto de estar ahí. Los pacientes no quieren saber cuánto sabés. Quieren saber cuánto te importan. Y durante la residencia, es cuando más cerca estamos de todo eso. Llegamos primeros y nos vamos últimos. Nos quieren no porque tomamos decisiones, sino porque estamos».
Más adelante, la Dra. María Marta Rivas, jefa del Servicio de Hematología, compartió una reflexión cercana y motivadora dirigida a quienes finalizan su etapa como residentes. Con sencillez y convicción, recordó que este es apenas el comienzo de un camino profesional que exige compromiso continuo:
«Cuando terminaron la carrera pensaron: ‘Ya está.’ Y empezó la residencia. Y ahora terminan la residencia… también piensan ‘Ya está’. ¡Pero no! Sepan que esto recién comienza. Así que si me permiten un consejo: sigan dudando. Sigan preguntando. Sigan aprendiendo. Y sobre todo… sigan haciendo lo que hacen con pasión».
El cierre de la ceremonia estuvo a cargo del Dr. Fernando Iudica, director médico del Hospital Universitario Austral, quien compartió un mensaje cargado de gratitud y sentido institucional. En sus palabras, resaltó el valor integral que tienen los residentes para la comunidad, el hospital y, por supuesto, para los pacientes:
«¿Qué sería de nuestro hospital sin residentes? Seguramente es una de las causas que nos hacen no perder la alegría. Tener residentes beneficia en primer lugar a la comunidad: aumenta el número de profesionales idóneos, capacitados, con capacidad para satisfacer necesidades locales, provinciales y nacionales. En segundo lugar, al hospital y a los médicos que trabajan en él: nos empujan a mantenernos actualizados, a innovar, a incorporar nuevas tecnologías. Pero sobre todo, mantienen la continuidad de la atención. Y en tercer lugar, a los pacientes. Se sienten seguros cuando pasan a verlos a cualquier hora, les abren el corazón, los incorporan a la familia. Les da tranquilidad y paz verlos.
Los residentes aprenden a ser empáticos, compasivos, desarrollan la escucha activa. Que la voz del paciente no sea un ruido más en el trabajo diario”.
A quienes inician este camino, los alentamos a formarse con pasión y dedicación, sabiendo que cada paso suma al cuidado de las personas. Y a quienes egresan, nuestro reconocimiento y orgullo: este es solo el comienzo de una vida profesional que seguirá creciendo con cada paciente, cada duda y cada aprendizaje.